Querido e inolvidable Jose Manuel,
después de una entrañable comida acompañado de Paula y Montse, echando de menos a mi «cachorro» Marc, como no podía ser de otra manera, hemos hablado de ti.
Dios!!!, no sabes como te echamos de menos todos. Me comentaba Montse que te echaba de menos en mis entradas en el Blog. Cuánta razón tienen… perdón…
Perdona que haya dado por hecho, como siempre, que estás a mi lado y por lo tanto olvidé dirigirme a ti. Como sabes, me agrada y me reconforta.
Hoy ha sido un día lluvioso, de aquéllos que te apetece olvidar que el mundo existe, aquéllos en los que te postras y miras el horizonte, ves un cielo gris, tristeza por doquier, parece incluso que desaparece el ánimo y de repente… algo te recuerda quién eres, de quién estás rodeado, tu hoja de ruta, tu momento, tus sensaciones, tus ilusiones, la razón de tu existencia…
Elevo la mirada al cielo gris y te veo. Sonriente como siempre, iluminando mi camino, animando mi vida, recordándome que cada instante que me regala la vida, debe ser disfrutado como el GRAN MOMENTO.
Reflexiono mientras escucho música, mientras mi Reina y mi Princesa descansan en la habitación, me imagino a mi «cachorro» a unos cuantos kilómetros de distancia, siendo feliz, viviendo la vida que ha elegido…
… Como no puede ser de otra manera, pienso en ell@s también, mi familia ASM. Dios!!! qué feliz me siento de formar parte de algo que tú y yo jamás hubiéramos soñado…
Jose Manuel, no tengo ni la más remota idea de lo que mi familia ASM va a alcanzar en el futuro, sin embargo, créeme si te digo que se lo merecen todo, absolutamente todo!!!
Mira, en la Convención, que recientemente celebramos, sólo pude expresar públicamente lo que mi corazón siente, sostenibilidad para todos!!!
No te imaginas lo que me motiva la idea de ver a todos los empresarios evolucionando hacia la prosperidad, hacia la sostenibilidad, hacia un futuro cierto. No te imaginas lo que me motiva compensar a todos los compañeros, empleados de ASM, a todos los proveedores que hacen posible la nueva ASM.
… Algún día te hablaré de mi «mamasita» a la que tanto quiero y no puedo demostrar…
Jose Manuel, cómo se puede describir lo que siento??? Creo en ello, más allá de la marca, de la nueva situación… es que son las personas, es que es la lección que me han dado los últimos años, es que no puedo reprimir mi ADMIRACIÓN.
Como tú me enseñaste, no puedo dejar escapar la oportunidad de decirte que sí, que he tratado de apartar del camino a aquél que solo pensaba en él. Te aseguro Jose Manuel, que lo que hoy tenemos, es lo que hay, es lo sano, es por lo que vale la pena que hoy a las 16:25 horas de la tarde, observando el cielo nublado, me emociono pensando en que algún día, todo lo que se merecen, lo recibirán, porque la vida es así, la vida devuelve… salvo a ti, que te apartó de todos nosotros… Cómo te hubiera gustado conocerles a todos, sin excepción… Qué pena que no estés aquí… Una lágrima va contigo, viendo como tu sonrisa alumbra el cielo nublado…
Sigue con nosotros, sé que el FUCSIA te hubiera hecho feliz y sigue dándome fuerzas para seguir luchando por tu LEGADO, aquél que me enseñó que la VIDA está hecha para luchar por lo que crees, soñando, luchando e incluso sufriendo!!!
Gracias Jose Manuel.
Dios!!! cómo te quiero y cuánto te echo de menos.
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